Discurso presidencial en el Evento de Alto Nivel sobre la Financiación para el Desarrollo en la era de la COVID-19

Tema / Noticias Recientes / Discurso presidencial en el Evento de Alto Nivel sobre la Financiación para el Desarrollo en la era de la COVID-19
Discurso presidencial en el Evento de Alto Nivel sobre la Financiación para el Desarrollo en la era de la COVID-19

El Presidente de la República, S. E. Obiang Nguema Mbasogo, ha participado de forma virtual, desde el Palacio del Pueblo de Malabo, en el Evento de Alto Nivel sobre la Financiación para el Desarrollo en la era de la COVID-19 y más allá. Reproducimos su intervención, desarrollada en la jornada del 29 de septiembre.

Quiero en primer lugar expresar mis agradecimientos al Secretario General de las Naciones Unidas y los primeros ministros de Canadá y Jamaica por organizar esta reunión para intercambiar impresiones sobre los esfuerzos necesarios que nos permitan enfrentar al Covid-19 y afrontar sus consecuencias. Iniciativas como esta son un aporte importante a los esfuerzos por erradicar la pandemia.

Este evento es especialmente importante, ya que aglutina a los jefes de Estado y de Gobierno, representantes de instituciones financieras, el sector privado, la sociedad civil y expertos, donde cada uno de estos tiene su propio ámbito de actuación, ya que nos necesitamos mutuamente ante la crisis que nos azota.

Como ya lo dije en mi discurso de la semana pasada durante el debate general del 75º Aniversario de la Fundación de las Naciones Unidas, la forma más eficaz de combatir la enfermedad de la pandemia del COVID y sus nefastas consecuencias es la unidad entre los países del mundo, ya que no hay ningún solo país que no ha sufrido los efectos negativos de la COVID-19.

El órgano que mejor se ajusta para coordinar los esfuerzos de todos es la ONU; una plataforma que goza de legitimidad requerida y la aceptación de todos, amén de que posee los elementos y herramientas para optimizar los esfuerzos colectivos, a fin de combatir y mitigar la pandemia y los efectos negativos de la COVID-19.

Excelencias;
La preocupación del COVID-19 y sus consecuencias no deben distraernos de los muchos problemas que afectan a la humanidad, al contrario; queda claro que la pandemia agudizará la extrema pobreza, el hambre, los conflictos, crisis migratoria, deportaciones forzosas, etc., que han sido exacerbados por la situación actual y, por consiguiente, todo hace indicar que la crisis actual se prolongará con el tiempo.

Es imprescindible que redoblemos los esfuerzos de solidaridad y de cooperación internacional, donde la Agenda 2030 para el desarrollo sostenible sigue siendo el mejor mecanismo disponible para hacer frente a los problemas que afectan al mundo.

Su cumplimiento igualmente requiere de la contribución de todos y de la cooperación internacional; por lo tanto, es importante que la arquitectura financiera mundial tenga como prioridad alinearse o reorientarse hacia la potenciación de los Objetivos de Desarrollo Sostenible.

La pandemia se está convirtiendo rápidamente en una crisis humanitaria, económica, política y social que amenaza con llevar a países enteros a un retroceso que podría tener consecuencias imprevisibles para la estabilidad. Estos son principalmente países en desarrollo, y sería conveniente que los mismos hagan un esfuerzo mayor en forma de asistencia para aliviar las posibles nefastas consecuencias de la COVID-19 como problema global a combatir.

En Guinea Ecuatorial tomamos medidas prácticas cuando la situación así lo requería; con la declaracion de estado de alarma sanitaria, de confinamiento y otras restricciones para salvaguardar a la población, siempre bajo recomendación de los expertos.

Hemos realizado grandes esfuerzos económicos para proteger a la población más vulnerable, paliar los efectos del desempleo y el colapso de los sectores importantes de la economía. Hemos tomado medidas para la incentivación con ayuda a las pequeñas y medianas empresas, distribuyendo paquetes de ayuda y otorgando beneficios fiscales.

Excelencias;
Finalmente proponemos que es conveniente crear o establecer un sistema sanitario público, universal, de carácter global, amén del apoyo de las organizaciones internacionales financieras, donaciones privadas, etc. La idea de organizar una vida sana a los pueblos está recogida en los Objetivos de Desarrollo Sostenible e incluso la Asamblea General aprobó una resolución al respecto en diciembre de 2012”.

Cortesía de:

Texto: Pilar Cecilia Ayecaba
Foto: Manuel Mangue 
(Equipo Prensa Presidencial)
Oficina de Información y Prensa de Guinea Ecuatorial

Fuente: https://www.guineaecuatorialpress.com/noticia.php?id=16320